Aunque la “cuesta de enero” suele referirse a la situación económica de una persona o familia, creemos que este nuevo año tan particular también presentará una cuesta de enero emocional. Cuando comenzó la pandemia, muchos pensaron que en 2021 ya estaríamos librados de ella, pero desafortunadamente no es así. Por ello, este año más que nunca, necesitamos preparar nuestras finanzas personales para comenzar el año con el pie derecho.
Primeramente debemos definir a qué nos referimos cuando hablamos de cuesta de enero para el 2021. Como podemos notar, este nuevo año no parece traer consigo demasiados cambios con respecto al anterior. Si bien se ha avanzado en el desarrollo de varias vacunas, la pandemia aún sigue latente y también siguen presentes sus consecuencias económicas. Este año, la cuesta de enero seguro será aún más dura, ya que es el comienzo de un año que trae consigo consecuencias severas del año precedente.
Por mucho que quisiéramos dejar atrás la necesidad de un ahorro para enfrentar los vaivenes económicos y creer que ajustar las finanzas personales son un mal recuerdo del pasado, la mejor manera de superar la cuesta de enero es preparándonos para lo que se avecina.
En este sentido, luego de la pandemia causada por el virus del COVID-19, podemos decir que esta cuesta será principalmente «emocional». Esto quiere decir que pondrá en funcionamiento un mecanismo mental en la sociedad, la cual se vio afectada emocionalmente por las disposiciones de aislamiento, de estar separados en las fiestas de los adultos mayores, o de enfrentarse a una «nueva normalidad» que pareciera que llegó para quedarse.
Aunque muchas familias también pueden experimentar la tradicional cuesta de enero económica, causada por el aumento de los gastos en la época de fiestas y fin de año, sin dudas este año será mucho menor. Se ha visto una gran caída en las compras navideñas y se han cancelado fiestas y reuniones de todo tipo. Probablemente, en enero 2021 sufriremos otro tipo de cuesta de enero, que los profesionales de la salud determinan tendrá un carácter emocional.
A principios del 2021, probablemente nuestras preocupaciones estarán relacionadas a la inestabilidad y no a la economía, tales como sentir la presión de quedar sin trabajo, el sufrimiento de no ver a la familia, sentir miedo a un nuevo confinamiento o al fallecimiento de un ser querido.
Una nueva «cuesta de Enero»
La cuesta de enero no va a ser solo económica, va a ser emocional. Como toda conducta social, las emociones y trastornos de este comienzo dificultoso afectan nuestro juicio a la hora de tomar decisiones financieras importantes, tales como si es necesario gastar en esas ansiadas y lujosas vacaciones o si realmente vale la pena seguir ahorrando para comprarnos un coche o alquilar un nuevo espacio.
Es por ello que, desde Préstamo Capital, sugerimos tomar el camino más sensato previo a dejarnos llevar por la «cuesta emocional». Recomendamos preparar las finanzas personales y familiares de cara a un año que aún es incierto, a través del ahorro y el buen manejo del dinero con el que ya contamos, de forma tal que este no sea un dolor de cabeza que debamos sumar a la ansiedad que genera este futuro 2021.
No habrá manera de evitar la cuesta, ni económica ni emocional, pero sí de superarla. Para estar preparados y anticipar las dificultades que este año pueda acarrear, en Préstamos Capital os ofrecemos préstamos personales que te permitirá ampliar tus posibilidades económicas y ganar liquidez en tiempos difíciles.
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