Son muchos los casos en los que se necesita de préstamos para cubrir diferentes necesidades. Bien sea para reformar tu vivienda o pagar deudas, es común no contar con el capital suficiente, por lo que pensamos en solicitar financiamiento. En estos momentos, la gran duda es ¿puedo pedir préstamo?
Para saber si puedo pedir préstamo, existe una herramienta financiera de gran ayuda: la regla del 35%. Este método es realmente útil para saber si estás o no en condiciones de solicitar un financiamiento. Veamos un poco más en el siguiente artículo.
¿Qué es la regla del 35%?
Como destacamos antes, la mejor forma de saber si puedo pedir un préstamo es optar por la regla del 35%, pero ¿de qué se trata? En palabras simples, esta regla determina tu capacidad de endeudamiento antes de solicitar un crédito.
El Banco de España sugiere que no debes usar más de 35% de tus ganancias netas mensuales para pagar deudas crediticias. Dicho de otro modo, la cuantía total de todos tus pagos mensuales como préstamos, hipotecas o tarjetas de crédito, deben suponer como máximo el 35% de lo que ganas mes a mes.
Si bien una duda común es si puedo pedir un préstamo, otra interrogante es ¿por qué debe ser el 35% y no el 50%? Los expertos en la materia, desaconsejan totalmente gastar más de este porcentaje en pago de deudas, debido al peligro que implica.
Pagar importes que superen la regla del 35% en deudas, podría generar la imposibilidad de responder a otros gastos. Por otro lado, corres el riesgo de no tener dinero para cubrir imprevistos.
Teniendo esto claro, la regla del 35% es realmente útil para determinar si puedo pedir un préstamo. Considera todos los aspectos relacionados sobre el financiamiento de tu preferencia como la tasa de interés y el coste de las cuotas mensuales.
¿Cómo calcular si puedo pedir un préstamo?
La regla del 35% es todo lo que necesitas para saber si puedo pedir un préstamo. Veamos un ejemplo simple: si quieres solicitar un financiamiento de 20.000€ para realizar reformas en tu vivienda.
Si tienes un salario neto mensual de 1.200€, en este caso, debes aplicar la regla del 35% para definir si puedo pedir un préstamo usando la siguiente fórmula: Cuota mensual del préstamo/ingresos mensuales netos x 100. De acuerdo con esto, existen diferentes supuestos con respecto a la devolución del préstamo:
Caso 1:
- Plazo de devolución: 3 años
- Cuota mensual: 628.59€/mes
- Ratio de endeudamiento: 52,38%
Caso 2:
- Plazo de devolución: 5 años
- Cuota mensual: 409.90€/mes
- Ratio de endeudamiento: 34,16%
Caso 3:
- Plazo de devolución: 7 años
- Cuota mensual: 331.38€/mes
- Ratio de endeudamiento: 27,61%
En este escenario, un plazo de devolución de 5 a 7 años es una opción más viable si deseas mantener la cuota mensual dentro de un límite del 35% de tus ingresos mensuales netos.
Para calcular la cuota mensual del préstamo, puedes recurrir a un simulador de préstamos. Actualmente, la mayoría de bancos con presencia en línea y demás entidades financieras ofrecen esta herramienta.
¿Cuándo es conveniente pedir un préstamo?
Ahora que sabes cuándo puedo pedir un préstamo, también es importante comprender en qué casos es recomendable solicitar este producto financiero. Son muchas las situaciones en las que es prudente contar con un crédito como, por ejemplo:
- Comenzar un negocio: si tienes un plan sólido para un nuevo emprendimiento, un préstamo puede proporcionarte el capital inicial necesario para lanzar tu negocio. Esto te permite invertir en equipos, inventario o recursos humanos, y potencialmente generar ingresos a largo plazo.
- Cambiar el coche: comprar un automóvil nuevo o reemplazar uno en mal estado es una razón válida para solicitar un préstamo. Un coche confiable es esencial para la movilidad y puede ser una inversión a largo plazo.
- Hacer frente a reformas: las reformas en el hogar pueden aumentar el valor de tu propiedad y mejorar tu calidad de vida. Un préstamo te ayuda a financiar proyectos de renovación, como una cocina nueva o una ampliación.
- Salir de ASNEF: en algunos casos, es necesario obtener un préstamo para pagar deudas pendientes y salir de listas de morosos como ASNEF. Esto puede abrir puertas a futuras oportunidades financieras al mejorar tu historial crediticio.
En cualquier de estos casos, la única solución para conseguir el dinero que necesitas es pedir un préstamo. Sin duda, esta es la mejor forma de obtener grandes cantidades de dinero en poco tiempo.
¿Qué tipos de préstamos puedo pedir?
Actualmente, el mercado financiero es bastante amplio. Por ello, no solo debes preguntarte “¿puedo pedir un préstamo?” sino “¿cuál es el más adecuado?”. Algunas de las opciones disponibles son:
Préstamo personal
Un préstamo personal es una forma común de conseguir dinero para gastos limitados y sin presentar garantías hipotecarias. Entre otras cosas, es una buena opción para pagar un viaje, educación o necesidades personales.
Una de sus ventajas más importantes es que, por lo general, se aprueban con rapidez. Por otro lado, los plazos de devolución se pueden ajustar según el banco y las tasas de interés pueden ser variables o fijas.
Microcréditos
Los microcréditos son préstamos de pequeñas cantidades destinados a personas con ingresos bajos o sin historial crediticio sólido. Se utilizan generalmente para necesidades inmediatas o pagar otras deudas con intereses más altos.
Entre otras cosas, estos préstamos son fáciles de obtener y pueden ser útiles para cubrir gastos urgentes. Pero tienen un tiempo de devolución muy bajo que no suele superar los 30 días.
Préstamo de garantía hipotecaria
En estos préstamos, utilizas una propiedad como garantía. Esto puede ser una vivienda, local o piso. Las tasas de interés de estos préstamos son mucho más bajas gracias a la seguridad que ofrece la propiedad.
La cantidad de dinero que puedes obtener con este producto es significativo, por lo que son adecuados para proyectos a largo plazo o para consolidar deudas.
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