
Inicia un nuevo mes y la situación habitual es la misma: tienes que pagar facturas, deudas y demás obligaciones. El problema real con todo esto es cuando no eres capaz de abonar todos los pagos y comienzas a tener inconvenientes de solvencia. En escenarios como este te conviene pensar en refinanciar deuda.
Con la refinanciación de tus deudas puedes tener una oportunidad de prevenir que tus pagos se acumulen en el mes y recuperar el control sobre tu economía. Es posible que tengas dudas sobre cómo funciona este proceso y si te conviene realmente. Lee este blog hasta el final y conoce todos los detalles.
¿Qué es la refinanciación de deudas?
Antes de hablar sobre los pros y contras de refinanciar deuda, lo primero a tener en consideración es de qué se trata esta solución financiera. En palabras simples, es un proceso que ofrece un banco o una entidad prestamista con el fin de ayudarte a reestructurar las condiciones de pago que ya tienes.
Cuando optas por la refinanciación de la deuda no estás haciendo otra cosa que financiar nuevamente las obligaciones, pero con nuevos términos que te permitan responder mejor por los pagos. Actualmente, hay tres formas para refinanciar deuda en España y son las siguientes:
- Novación: aquí solo estarías yendo a tu banco para modificar las condiciones de los préstamos y demás productos financieros que tienes contratados. Dicho de otra forma, es una negociación con el banco para acceder a cuotas más bajas o un mejor interés.
- Subrogación: en este caso, refinanciar deuda implica trasladar todos los pagos pendientes de un banco a otro. Con esto, obtienes condiciones mucho más factibles para ti.
- Reunificación de deudas: reunificar deudas consiste en agrupar todos los préstamos en un solo pago mensual.
Refinanciar deuda vs. reunificar deudas
Muchas personas tienen dudas sobre la diferencia entre reunificar deuda y refinanciar deuda. Lo primero a considerar es que la reunificación de deudas es una forma de refinanciación, así como la subrogación y la novación. Teniendo esto en cuenta, vamos a desglosar un poco más sobre las disimilitudes entre ambas:
- Refinanciación de deudas: cuando decides refinanciar deudas, buscas opciones para mejorar las condiciones de los préstamos existentes. Esto lo haces con tu mismo banco (novación) o con otro (subrogación). En cualquiera de los dos casos, el objetivo es que cuentes con términos ajustados a tus necesidades financieras.
- Reunificación de deudas: este tipo de refinanciación te ayuda a unir varios préstamos pendientes de pago en un solo crédito. Lo anterior quiere decir que todos los préstamos previos se cancelan para que pases a tener uno solo. La finalidad, en este caso, es que asumas un pago menor por única vez en el mes.
Ventajas y desventajas de la refinanciación de deudas
Ahora que sabes de qué se trata refinanciar deuda, es momento de analizar cuáles son sus principales ventajas y desventajas. Así como cualquier otro producto financiero, hay factores que tienes que considerar para tomar la mejor decisión.
Ten presente que no conviene siempre optar por la refinanciación, sino en casos puntuales. En el siguiente apartado, vamos a resumir los beneficios e inconvenientes de refinanciar deuda.
6 ventajas de refinanciar deuda
Sin duda alguna, el beneficio clave de la refinanciación es mejorar tus cuotas de pago y tasa de interés, pero no es el único. Las principales ventajas de refinanciar deudas son las siguientes:
- Importe de pago mensual inferior: si recurres a la refinanciación de tus deudas y el banco accede, entonces las cuotas mensuales serán menores. Esto es bastante probable si el tiempo de amortización se extiende.
- Tasas de interés asequibles: la renegociación de las condiciones de tu préstamo te permite acceder a un interés más cómodo y ajustado a tus necesidades.
- Condiciones y términos flexibles: además de pagar menos y tener intereses más justos, contarás con mejoras en otras condiciones como comisiones y otros aspectos que puedan estar elevando lo que pagas actualmente.
- Unificación de deudas: refinanciar deuda es una estrategia inteligente para agrupar todos los pagos en una sola cuota mensual y reducir el importe total que pagas al mes.
- Mejora del historial de crédito: si estás en medio de un bache crediticio por impagos, con la refinanciación puedes mejorar esto. Asimismo, te ayudará a salir de listas de morosidad como ASNEF.
- Mayor control financiero: finalmente, pero no menos importante, si tienes mejores condiciones en tus préstamos, podrás garantizar el control sobre tu economía.
4 desventajas de refinanciar deuda
Sabemos que muchas veces resulta complicado tomar una decisión objetiva, por lo que queremos presentarte también las desventajas de refinanciar deuda. De esta forma, comprenderás si es lo que te conviene o no:
- Costos extras: en ciertos casos, refinanciar deuda conlleva costos extras como comisiones por cancelación anticipada y otros pagos que debes contemplar.
- Mayor tiempo de pago: para algunos es un beneficio y para otros no. En cualquier caso, refinanciar deuda también supone que vas a pasar más tiempo pagando el préstamo.
- Interés variable: si el nuevo préstamo que contratas posee interés variable, entonces pagarás más.
- Sobreendeudamiento: si reunificar tus deudas y no mantienes un buen control financiero, es posible que caigas en nuevas deudas en el futuro.
¿Cómo refinanciar deuda?
Si decides refinanciar deuda, lo primero a tener claro son tus necesidades y qué tipo de refinanciación te conviene más. Lo ideal es optar por la novación y llegar a un acuerdo con tu banco actual.
En el caso de que no sea posible, la subrogación es una buena alternativa y hay múltiples opciones en el mercado para contratar un nuevo crédito con condiciones mejoradas.
La reunificación de deudas también es una opción que te puede servir si ya tienes muchas deudas acumuladas y estás buscando unirlas todas en una sola cuota al mes.
Refinanciar deuda con préstamos
Refinanciar deudas es posible gracias a varias opciones de préstamos. Una de las mejores formas de hacerlo en estos días es con los préstamos de garantía hipotecaria que puedes conseguir en empresas de capital privado. Con este crédito, es posible usar una casa o local como aval hipotecario.
En Prestamo Capital, tienes la oportunidad de acceder a importes desde 15.000 € a 1.000.000 € para devolver en un plazo de hasta 20 años. Como puedes ver, se trata de una solución interesante, ya que contarás con grandes cantidades de dinero con requisitos mínimos. Lo mejor de todo es que no importa si estás en ASNEF.
Si necesitas mayor información sobre nuestros préstamos para refinanciar deuda, rellena este formulario de contacto y en 24 horas nos comunicaremos contigo para ayudarte a elegir un crédito ideal para ti.
¿Cuánto dinero necesitas? ¡Pídelo HOY!