¿Cómo reunir mis deudas en una sola cuota?

Un buen momento para recurrir a la reunificación de deudas es cuando tus pagos pendientes y sus intereses requieren una gran parte de tus ingresos mensuales. En una situación como esta, es normal que no puedas pagar el total de las deudas cada mes y la unificación es una alternativa confiable y segura.

Ahora bien, en el supuesto de que estés pasando por un momento financiero complejo, pero temporal, quizás este no sea el mejor camino. En este sentido, es importante que revises bien tu situación para tomar una decisión informada sobre reunir mis deudas.

¿Cómo reunir mis deudas en una cuota?

Para reunificar deudas tienes varias opciones, comenzando por la negociación con el banco o entidad con el que tienes la mayor cantidad de pagos pendientes. Si es tu banco de confianza, existe la posibilidad de que esta entidad pueda darte el préstamo de reunificación de deudas.

Generalmente, cuando llegas al banco y pides un crédito de cualquier tipo te piden un buen historial crediticio y que, por supuesto, tu nombre no esté en listas de morosidad como ASNEF o RAI. En caso contrario, no tendrás demasiada suerte en el proceso de solicitud.

Sin embargo, esto no quiere decir que no tengas opciones, pues como ya explicamos antes, las empresas de capital privado te pueden financiar. Lo primero que necesitas es un estudio personalizado de tu caso por parte de esta entidad que analiza el importe total de la deuda y los intereses que pagas.

Posteriormente, con este nuevo préstamo se cancelan todos los créditos a tu nombre para unificarlos en un nuevo préstamo con las condiciones discutidas anticipadamente.

Vale mencionar que todas las condiciones en las que se plantea la reunificación de deudas son nuevas, por lo que se obtiene una cuota mensual más baja, un plazo de amortización más largo y una tasa de interés más flexible.

Conoce los préstamos de reunificación

Si estás pensando en reunir mis deudas, sabrás que no hay una sola opción para hacerlo, sino varias. No obstante, uno de los más destacados en estos momentos es el préstamo con garantía hipotecaria de Prestamo Capital.

Una de las características más importantes de la garantía hipotecaria es que al utilizar una propiedad como aval de devolución del préstamo, puedes obtener grandes cantidades de dinero (entre 15.000 € y 300.000 €). Y el plazo de amortización es de hasta 20 años, lo que te ayudará en la reestructuración financiera.

Además de esto, con la garantía hipotecaria no solo dejarás de pensar en cómo reunir mis deudas, sino que podrás salir de ASNEF si es que tu nombre está en algún listado de este tipo.

Ventajas de reunir mis deudas

Sin duda alguna, la reunificación es un camino inteligente para reunir mis deudas, pues es una forma flexible y rápida de hacerlo. Sin embargo, si todavía tienes dudas, puedes revisar algunas de estas ventajas que te compartimos a continuación:

✅ Agrupar todos los pagos en uno solo para tener una cuota mensual mucho más baja.

✅ Oportunidad de contar con una tasa de interés más competitiva en comparación con otros productos financieros.

✅ Recuperación del control sobre tus finanzas.

✅ Una opción segura para salir de ASNEF, RAI o cualquier lista de morosidad.

✅ Tranquilidad y menor estrés financiero.

Reunir mis deudas vs. Refinanciación de deudas

Uno de los mayores conflictos al momento de salir de deudas es considerar si conviene más la reunificación o la refinanciación. Lo primero que debes tener en cuenta es que no son lo mismo y su mayor diferencia es que la reunificación requiere de un nuevo préstamo, mientras que la refinanciación se enfoca en mejorar las condiciones con las entidades prestatarias.

Dicho de otro modo, al refinanciar tus deudas, negocias con la entidad la mejor forma de adecuar el pago de tus obligaciones a tu situación económica actual. En este contexto, la entidad financiera evalúa tu caso y luego te ofrece un plan de pago.

Ley de Segunda Oportunidad: otra opción para saldar tus deudas

La Ley de Segunda Oportunidad es otra opción para reunir mis deudas, pero no aplica en el 100% de los casos. Uno de los principales requisitos es que tengas varias deudas y que hayas agotado todas las posibilidades de pago. Por otro lado, las hipotecas no se asumen dentro de esta ley, así que si las tienes debes pensarlo bien antes de acogerte.

Esta alternativa es ofrecida como medio para ayudar a particulares y autónomos a recuperar el control de sus finanzas y comenzar de cero. Si logras demostrar tu situación de insolvencia económica puedes ser beneficiado con la exoneración de la deuda.